Islam Sonora

Allah es todo justicia y todo sabio. Él nos creó y quiere que le conozcamos y adoremos solamente.Él no nos deja sin guía. Esto es parte de su misericordia. Él el mas glorificado y Exaltado, envio mensajeros y profetas para llevar un solo mensaje: todas las naciones deben someterse a la voluntad de su Creador y sólo adorarle. Esta es la esencia del Islam. Es el mismo mensaje llevado por Adam, Abraham, Moisés, Jesús y finalmente a la humanidad entera por Muhammed (la paz y las bendiciones sean con todos ellos)


LOS CINCO PILARES DEL ISLAM


Los Cinco Pilares del Islam

Existen cinco actos obligatorios de adoración que todo musulmán debe llevar a cabo minusiosamente. El no hacerlo implica un pecado grave. La estructura del islam descansa sobre estos cinco pilares. No se puede decir que alguien es musulmán si niega la obligatoriedad de alguno de estos actos.

Las cinco obligaciones de los musulmanes son las siguientes:
  1. La declaración de fe, Testificar que no existe ninguna verdadera deidad excepto Dios, y que Muhammad es Su Mensajero (Shahadah)
  2. Orar cinco veces al día (Salat)
  3. Pagar la caridad anual (Zakah)
  4. Ayunar durante el mes de Ramadán (Sawm)
  5. Realizar la peregrinación a La Meca (Hayy)


 La Declaración de Fe (Shahaadah)

Es obligatorio que toda perdona que pretenda ingresar al Islam crea y diga: Testifico que no existe ninguna deidad verdadera excepto Dios, y que Muhammad es Su Mensajero. Con esa simple, importante y poderosa declaración, se considera que una persona es parte del Islam. No existe ningún tiro de iniciación en el Islam.

Los conceptos incluidos en ese testimonio de fe pueden explicarse analizando las tres partes del mismo. La primera parte, “No existe ninguna deidad verdadera” es una negación al politeísmo. Es una negación de la existencia de toda otra deidad que no sea Dios, de todo entre que comparta los atributos divinos de Dios. La segunda parte que dice “excepto Dios” es una afirmación del monoteísmo. Dios es el único que merece ser adorado.


“Muhammad es el Mensajero de Dios” es la tercera parte de la declaración de fe. Se trata de la afirmación de que Muhammad es el último Profeta y Mensajero de Dios. Ese punto requiere además, aceptar incondicionalmente las tradiciones autenticas de Mohammad.


Al creer y pronunciar el testimonio de fe, una persona estará rechazando todos los falsos objetos de adoración y afirmando que Dios es el único digno de ser adorado. Dios no tiene pares ni iguales. Dios promete que una vez que una persona afirma y dice con sinceridad “Testifico que no existe ninguna deidad excepto Dios y que Mohammad es su mensajero”, se perdonan todos los pecados anteriores. Las buenas acciones que uno haya hecho previamente también serán recompensadas por Dios, el Mas Misericordioso.




Orar cinco veces al día (Salah)

 
Todo musulmán debe realizar cinco oraciones obligatorias al día. Al realizarlas, el musulmán debe orientarse hacia La Meca, hacia la primera casa construida para adorar al Único Dios. Esta casa es llamada la Kabbah, una estructura cúbica ubicada en lo que hoy es Arabia Saudita. Fue construida por el profeta Abraham y su hijo Ismael para adorar al único y verdadero Dios.


Uno debe recordar que el Islam no tiene reliquias ni símbolos sagrados. No adoramos la Kabbah; simplemente adoramos a Dios orientándonos a la Kabbah. Al mirar hacia la Kabbah en la oración, se unifican todos los musulmanes al adorar al Único Dios. Aquel que adore la Kabbah o a cualquier otro objeto creado será considerado un idólatra. Dicho en otras palabras, los materiales con los que fue construida esta casa no son más sagrados que los utilizados para construir cualquier otra casa.

 
Dichas oraciones tienen lugar durante el día y la noche, y son un recordatorio constante de la obligación y sumisión a Dios. Son un vinculo directo entre quien las realiza y Dios. Es la oportunidad de acudir a Dios, de dar gracias, de pedir perdón, y de pedir que nos otorgue Su guía y misericordia.


El musulmán puede realizar oraciones voluntarias con más frecuencia. Las oraciones. En el sentido general de súplica, pueden realizarse prácticamente en cualquier momento y lugar.




Pagar la caridad anual (Zakah)



Todo musulmán con suficiente prosperidad para acumular y retener un cierto monto de su riqueza tiene la obligación religiosa de dar a quienes lo necesitan. Dicha caridad es llamada Zakah en árabe, que literalmente significa purificación. Todas las cosas pertenecen a Dios; El Mas Misericordioso, y la riqueza simplemente le es confiada a los seres humanos. El pago de dicha caridad es una manera que tienen las personas solventes para purificar todo lo ganado éticamente y que Dios les ha otorgado. Además, medio directo de distribuir la riqueza en la sociedad y ayudar a los pobres y necesitado. El Zakah (caridad) también purifica el alma del que la da, reduce la avaricia, y fortalece la compasión y la generosidad en la humanidad. La tasa básica de esa caridad es un 2.5 % de la riqueza ahorrada durante todo el año. Se calcula sobre los ahorro, no sobre los ingresos.






Ayunar durante el mes de Ramadán (Sawm)


Todo musulmán pubescente físicamente capaz, debe ayunar durante el mes lunar de Ramadán. Este mes tiene un gran significado pues las primeras revelaciones del Corán a Muhammad sucedieron durante este mes. Dado que un año del calendario lunar es once días más corto que el calendario solar, el mes de Ramadán se va dando en distintas épocas del año conforme van pasando los años. Al igual que la caridad es una manera de purificar la riqueza, el ayuno es una forma de auto-purificación. El ayuno comienza al alba y termina al atardecer del lugar donde uno se encuentre. Durante el día, la persona debe abstenerse de comer, beber y mantener relaciones sexuales con su cónyuge. Estas actividades son permitidas desde el ocaso hasta el alba del día siguiente. El ayuno enseña autocontrol y paciencia. Al igual que una sincera adoración. Las dos festividades para los musulmanes son el Eid Al Fitr, que se celebra al finalizar Ramadán, y el Eid Al Adha, que se celebra al terminar la peregrinación (Hayy). El ayuno nos recuerda las condiciones de los necesitados y nos ayuda a apreciar las simples bendiciones que a menudo damos por sentadas, como un vaso de agua fresca o de poder comer a voluntad.






Realizar la peregrinación a la Meca (Hayy)

Todo musulmán debe realizar la peregrinación a la Kabah, en la Meca, al menos una vez en su vida si es que tiene los medios y la posibilidad de hacerlo. Allí se unen musulmanes de todo el mundo con el fin de adorar y complacer a Dios. Millones de peregrinos visitan la Kabbah y realizan el Hayy anualmente.


El rito del Hayy tiene su origen en el profeta Abraham y fue reestablecido por Muhammad. La peregrinación a la Meca obliga a los peregrinos a romper todas las barreras raciales, económicas y sociales que pueden contaminar sus sociedades. También invita a cada peregrino a practicar la paciencia, el auto-control y la piedad. Los peregrinos usan ropa simple que dejan de lado las distinciones de clase y cultura. Todos estos actos obligatorios de adoración mantienen vivo el recuerdo de Dios y les recuerdan a los musulmanes que de Dios venimos y que a Dios retornaremos.

 

Bibliofrafía
El Islam es...
Una Introducción al Islam & sus principios
Por: Pete Seda
Traducción Lic.
Muhammad Isa García
Revisión: Lic. Dabina Rigoni